Estrategias de comprensión lectora: progresión de la comprensión lectora durante la Educación Primaria

Estrategias de comprensión lectora: progresión durante la Educación Primaria

Progresión de la enseñanza de la comprensión lectora durante la Educación Primaria

Comprensión lectora a lo largo del segundo y tercer período de la Educación Primaria

Existen una gran variedad de estrategias de comprensión lectora cuyo objetivo es mejorar y perfeccionar la competencia lectora. Durante la Educación Primaria, sobre todo durante el segundo y tercer período (de 8 a 12 años) la mayoría de los niños consolidan todos los procesos de pronunciación, se introducen en el desarrollo del vocabulario y lo que es más importante trabajan y perfeccionan la comprensión lectora. A lo largo de este período, los niños aprenden e interiorizan las reglas necesarias para formar frases y oraciones. También aprenden como usar correctamente otras categorías gramaticales como los nombres, los verbos, los sujetos, los artículos, los adjetivos y los pronombres.

Por otro lado, y como podéis consultar en el siguiente post, durante esta etapa se trabaja conjuntamente con el niño para introducir y mejorar la escritura. Se trabaja para ampliar el conocimiento del código escrito, de los diferentes tipos de texto y de los diversos tipos de formato.

 Estrategias para mejorar la comprensión lectora

  1. Aprendizaje cooperativo e interactivo: a esta edad los niños aprenden mucho interactuando con los compañeros y con el mundo. Por ello, un aprendizaje mediante este tipo de estrategias en las que se requiera la participación del alumno a nivel individual y sobre todo a nivel grupal, puede mejorar el trabajo de la comprensión lectora. Se trata de una estrategia muy útil y muy fácil de llevar a cabo. Los niños se pueden organizar en grupos cooperativos en los que trabajen juntos con sus compañeros para comprender un texto. La aportación individual de cada uno les hará ver a los demás niños distintos puntos de vista. Además es importante recordar que cada niño tiene unas determinadas características personales e individuales, por lo que a lo mejor un niño centrará más su atención en unas determinadas informaciones del texto y no en otras. En ese caso, si el niño trabajara solo, no se daría cuenta de la información que está obviando. Pero al utilizar esta estrategia, y trabajar en grupo otro niño puede focalizar la atención en otro tipo de detalles, y por lo tanto, mutuamente pueden compartir ideas, y sobre todo ayudarse.
  2. Preguntas-Respuestas: una forma de saber si el niño ha comprendido lo que ha leído sería preguntarle una serie de cuestiones sobre el texto tras una primera lectura. Mediante esta estrategia de comprensión lectora el niño deberá responderlas lo mejor que pueda. Responder a preguntas de un texto es una estrategia de comprensión lectora muy útil para reafirmar no sólo que se ha comprendido el texto, sino que se ha comprendido correctamente. Tras haber respondido a las preguntas sobre el texto, el niño deberá volver a leer una segunda vez el texto y tratar de corregir aquellas preguntas que haya fallado. Los tipos de preguntas que hace el profesor pueden influir en el nivel de comprensión lectora del niño. Un método que utiliza la siguiente estrategia de comprensión lectora con el fin de mejorar la competencia lectora lo podéis encontrar en el siguiente post.
  3. Formulación de preguntas: otra buena estrategia de comprensión lectora bastante relacionada con la anterior, sería la de que el propio niño generara una lista de preguntas sobre el texto. De esta manera las preguntas deberán estar relacionadas con el texto leído, por lo que será necesario haber comprendido correctamente la información leída para poder proponer preguntas en función al tema en cuestión.
  4. Hacer resúmenes: como ya apuntábamos en anteriores posts, hacer resúmenes sobre la información leída ayuda a comprender el texto. Para hacer un buen resumen es necesario comprender las ideas leídas, ser capaces de detectar los datos esenciales (es decir, las ideas clave) y descartar aquellos que no son relevantes, e integrar toda la información en unas breves líneas. Quien lea el resumen tiene que ser capaz de entender las ideas principales del texto sólo leyendo esas 4 líneas.

Autor: Dr. Jaume Guilera

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