Concentración : Trabájala mediante juegos
Concentración : Trabájala mediante juegos
La concentración es una habilidad que se desarrolla a lo largo de la vida. Se trata de la capacidad de centrar toda tu atención en un objeto o acción concreta de manera voluntaria. Además, debes evitar cualquier distracción, hechos u objetos que puedan inferir en tu proceso de concentración. Podría tratarse de un tipo de atención sostenida y selectiva.
¿Cuál es la diferencia entre atención y concentración?
Por un lado, a través de la atención, logramos canalizar nuestra mente para centrarnos en un estímulo concreto. Es decir, consistiría en atender a un sólo objeto específico, ignorando todos los demás objetos de nuestro alrededor. Por otro lado, con la concentración, conseguiremos mantener la atención focalizada y centrada sobre un punto de interés, durante un largo período de tiempo, el que sea necesario.
Que tu hijo posea la capacidad de atender no quiere decir necesariamente que sepa o pueda concentrarse.
La atención, pero sobretodo la concentración, son capacidades sumamente importantes para los niños en edad escolar. De hecho, este período es el más importante para el ser humano, debido a la gran cantidad de conceptos y habilidades que tienen que aprender y desarrollar. Por ello, es muy importante conseguir altos niveles de concentración.
Sin concentración no hay aprendizaje.
¿Podemos mejorar la concentración de nuestros hijos mediante juegos?
En anteriores posts, ya comentamos la importancia de trabajar nuestra concentración para poder atender a un estímulo durante un período prolongado sin distraernos. Además, también compartimos con vosotros una serie de trucos que podéis utilizar para mejorar la concentración de vuestros hijos.
En este post, nos gustaría proponeros un listado de juegos con los que trabajar la concentración. El objetivo principal de estos juegos es desarrollar, trabajar y mejorar la concentración de nuestros niños, siempre desde la diversión. Es muy importante mantener a nuestros hijos animados y motivados.
A continuación os dejamos un listado de juegos. La mayoría son juegos muy cotidianos que ya conoceréis. No obstante, requieren ciertos niveles de atención y concentración:
- Memory: los niños pueden empezar a jugar a partir de los 20 meses. Consiste en encontrar parejas. Se colocan todas las cartas boca abajo. El niño/a debe ir levantando una a una (levantará un máximo de dos cartas en cada jugada). El niño/a debe ir memorizando la localización de cada una de las cartas, para así encontrar sus respectivas parejas. En función de la edad utilizaremos más o menos parejas. Pueden jugar en solitario o en grupo.
- Rompecabezas o puzzle: estos juegos requieren concentración, atención y capacidad visual. Además con este tipo de juegos, también trabajarás las funciones ejecutivas como: organización, planificación, persistencia dirigida a la meta. La dificultad del puzzle se escogerá en función de la edad del niño y de sus capacidades visoconstructivas.
- Juego de Simone: este juego requiere la habilidad de combinar colores y música. Con este juego vas a combianr capacidad autiviva, atención, retención, secuenciación y memoria de trabajo. Necesitas la máquina para poder jugar. Puedes jugar solo o acompañado. Se te va a mostrar una secuencia de colores (unas luces de colores se van a iluminar en orden) y tendrás que repetirla cuando termine. Esta secuencia también podrá ir combinada con sonidos; así pues, cada luz emitirá un ruido distinto. Tu misión será recordarla y repetirla, ayudándote de las pistas auditivas y visuales.
- Busca las 7 diferencias: con este juego vas a trabajar la capacidad de concentración, mediante la atención focalizada y sostenida.
- Colocación de muñecos: este juego es ideal para trabajar la relación paterno-filial. Colocaos en un sitio cómodo, uno en frente del otro. El padre/madre debe colocar varios muñecos uno al lado del otro (la cantidad de muñecos se escogerá en función de la edad del niño y de su capacidad retentiva). Se le avisará que debe mirar los muñecos, concentrarse y fijarse en el orden y su posición. A continuación, vamos a mover los muñecos y le vamos a pedir que los vuelva a poner en el sitio donde estaban.
- Mandalas: con este juego trabajarás la concentración. Debes evitar salirte de las líneas. Además, debes intentar que nunca coincida un mismo color en dos casillas consecutivas. Por último, este tipo de juego también ha demostrado ser bueno para potenciar la capacidad de relajación.
- Juegos de construcción: con este tipo de juegos vas a trabajar no sólo la concentración, sino también la capacidad manipulativa del niño. Empieza con torres de 2 cubos, posteriormente 3, etc. Cuando el niño vaya consiguiendo objetivos pequeños, ves añadiendo dificultad.
- Copiar dibujos: implica fijarse en los detalles. Trabajarás atención selectiva.
- Dibujos con números: se trata de esos dibujos en los que debes unir una secuncia de números para conseguir una forma determinada. A parte de trabajar los dígitos, también trabajaras psicomotricidad fina, etc
- Sopas de letras también se resuelven con mucha atención.
- Laberintos son divertidos y necesitan atención e inteligencia espacial.
- Domino
- Parchís
- La oca
- Etc.
En conclusión, existen todo tipo de juegos; y los juegos son la mejora manera de aprender. Los juegos son divertidos, entretienen y motivan. Mediante los juegos los niños son capaces de aprender de una manera inconsciente y duradera. No obstante, es importante seleccionar qué tipo de juegos vamos a utilizar.
La mayoría de los juegos de mesa unen la diversión con el aprendizaje. Por lo tanto es trabajo de los padres, profesores o psicólogos unir estos dos grandes bloques: ocio y aprendizaje. Además, podemos trabajar todas estas capacidades y habilidades:
- Funciones ejecutivas
- Memoria (selectiva, de trabajo, retención, a largo plazo…)
- Concentración
- Capacidad visual
- Capacidad auditiva
- Capacidad visoconstructiva
- Atención (sostenida, selectiva..)
- Etc.
Autor: Dr. Jaume Guilera