TDAH y Altas Capacidades
Los niños con TDAH y altas capacidades pueden tener los mismos problemas que los niños con TDAH. Los problemas de atención e impulsividad, cuando no se detectan a tiempo en los niños superdotados, pueden afectar negativamente al rendimiento escolar y al desarrollo psico-social del niño.
Para estudiar si el diagnostico de TDAH es válido en niños con altas capacidades se han llevado a cabo varios diferentes estudios.
En el estudio de Antshel de 2007 seleccionaron una muestra de niños que habían participado en los estudios longitudinales de familias con niños con TDAH del Hospital General de Massachusetts. La muestra de familias la dividieron en un grupo de 92 niños con un coeficiente de más de 120 (grupo control) y un segundo grupo de 49 niños con un coeficiente intelectual alto (C.I. >120)y que además cumplían criterios de diagnóstico para el TDAH.
Del segundo grupo (TDAH y C.I. alto), la mayoría de los niños presentaban las siguientes características:
– eran del subtipo combinado
– en la familia había más incidencia de TDAH que en las familias del grupo control
– repetían curso con más frecuencia
– puntuaban peor en el diseño de bloques WISC-III
– presentaban más patología mental asociada
– presentaban más dificultades en otros ámbitos del desarrollo.
Los niños con un coeficiente intelectual alto y TDAH muestran las mismas características patológicas en diferentes áreas (familia, problemas escolares, patrón cognitivo, comorbilidad) que los niños con TDAH y un coeficiente intelectual medio (Antshel et al., 2007)
Muchos niños con altas capacidades se aburren en clase. Puede que encuentren que la materia es muy fácil o que el ritmo de la clase es lento. Con el tiempo, ir a clase acaba por ser desmotivador. Suelen buscar otras maneras de distraerse, como hablar con los compañeros, portarse mal, crear problemas en la clase, y todos estas estrattegias solo para que les pasen más rápido las horas en el colegio. Pero para los profesores, esta conducta desatenta o pasota del niño, se puede interpretar como una falta de capacidad para concentrarse o como un problema de aprendizaje.
Además el niño superdotado aprueba muchos exámenes estudiando menos que sus compañeros. En parte porque puede compensar muchas veces la falta de estudio o de conocimientos, con su alta capacidad de integrar y analizar la información nueva. Además, los niños con TDAH tienen más problemas en sus capacidades ejecutivas y organizativas. Estos dos problemas sumados, nos pueden dar un retraso en las funciones ejecutivas de estos niños, y que sean alumnos con poca capacidad de trabajo.
En muchas niñas, que dan menos problemas de conducta en clase o en casa, muchas veces el diagnostico de TDAH se puede demorar en el tiempo. En el caso contrario, en niños con un coeficiente intelectual bajo, la inhibición de respuesta esta esencialmente mediada por la inteligencia y no por la baja atención. A medida que el niño tiene menos capacidad cognitiva, en el TDAH predomina más la impulsividad que la inatención (Buchmann et al., 2011). Por lo tanto, muchas de estas niñas, son muy poco impulsivas y controlan bien su conducta en el colegio.
Rendimiento Académico y TDAH con Altas Capacidades
El TDAH es uno de los trastornos más prevalentes en la población infantil, pero a veces se pueden confundir las causas de las conductas debidas a altas capacidades o al déficit de atención. De hecho, y a pesar de las controversias, los estudios empíricos respaldan el hecho de que un niño puede presentar altas capacidades y TDAH a la vez (Cordeiro et al., 2011).
Por lo tanto, los niños con TDAH y los niños con altas capacidades pueden tener problemas similares como hemos comentado anteriormente.
Aunque existe el fracaso escolar en niños superdotados, un estudio reciente de 2018 de la revista “Intelligence” indica que la creencia que los niños con altas capacidades tienen más riesgo de padecer fracaso escolar es falsa.
Por el contrario, el estudio de Guez que replicó los hallazgos de estudios anteriores con niños de EE. UU, demuestra que los niños superdotados tienen mejor rendimiento que sus compañeros de clase. Además, el estudio puso de manifiesto que los niños con altas capacidades puntúan más alto en las escalas de motivación y autoeficacia (Guez et al., 2018).
Estudios empíricos han intentado contribuir a este debate. Por ejemplo, la relación que existe entre el coeficiente intelectual y las dificultades escolares en el TDAH, en el estudio de Rommelse de 2017 se estudió esta relación con una muestra de 2221 niños entre 10 y 12 años,
En el estudio se puso en evidencia que una puntuación más alta en el coeficiente de inteligencia estaba relacionada con menos problemas de atención. Aunque el estudio también puso de manifiesto que los niños muy inteligentes también pueden tener problemas escolares y fracaso escolar. Por lo tanto, hay que observar su evolución y buscar ayuda si empiezan a bajar el ritmo escolar o las notas (N. Rommelse et al., 2017).
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Bibliografía:
Antshel, K. M., Faraone, S. V., Stallone, K., Nave, A., Kaufmann, F. A., Doyle, A., Fried, R., Seidman, L., & Biederman, J. (2007). Is attention deficit hyperactivity disorder a valid diagnosis in the presence of high IQ? Results from the MGH Longitudinal Family Studies of ADHD. Journal of Child Psychology and Psychiatry, and Allied Disciplines, 48(7), 687-694. https://doi.org/10.1111/j.1469-7610.2007.01735.x
Buchmann, J., Gierow, W., Reis, O., & Haessler, F. (2011). Intelligence moderates impulsivity and attention in ADHD children: An ERP study using a go/nogo paradigm. The World Journal of Biological Psychiatry: The Official Journal of the World Federation of Societies of Biological Psychiatry, 12 Suppl 1, 35-39. https://doi.org/10.3109/15622975.2011.600354
Cordeiro, M. L., Farias, A. C., Cunha, A., Benko, C. R., Farias, L. G., Costa, M. T., Martins, L. F., & McCracken, J. T. (2011). Co-Occurrence of ADHD and high IQ: A case series empirical study. Journal of Attention Disorders, 15(6), 485-490. https://doi.org/10.1177/1087054710370569
Guez, A., Peyre, H., Cam, M., Gauvrit, N., & Ramus, F. (2018). Are high-IQ students more at risk of school failure? Intelligence, 71, 32-40. https://doi.org/10.1016/j.intell.2018.09.003
Rommelse, N., Antshel, K., Smeets, S., Greven, C., Hoogeveen, L., Faraone, S. V., & Hartman, C. A. (2017). High intelligence and the risk of ADHD and other psychopathology. The British Journal of Psychiatry: The Journal of Mental Science, 211(6), 359-364. https://doi.org/10.1192/bjp.bp.116.184382
Rommelse, N. N. J., Altink, M. E., Oosterlaan, J., Buschgens, C. J. M., Buitelaar, J., & Sergeant, J. A. (2008). Support for an independent familial segregation of executive and intelligence endophenotypes in ADHD families. Psychological Medicine, 38(11), 1595-1606. https://doi.org/10.1017/S0033291708002869